Capitulo 5: cuando estas tú

Tras ese apasionado beso, Zayn y tú os separáis. Observas con delicadeza sus ojos brillantes. Ahora puedes apreciarar en ellos la pureza y la tranquilidad que transmiten.
-Siento haberte juzgado sin apenas conocerte.- le dices.
-No te preocupes, pero ahora no digas nada, por favor. Eres la única que sabe esto.-
-¿Ninguno de tus amigos lo sabe?- preguntas extrañada
-¿Amigos? ¿Que amigos? Solo podría considerar amigo a Mikel y apenas lo veo...-
-Bueno, creo que yo lo veré ahora más. Esta de rollo con mi amiga.
-¿La rubia?
-Si.
-Te dije que estaba buena. Seguro que le pegara un polvazo increíble
-Vaya, ya vuelves a ser tú. Que poco a durado...
Te levantas de la cama y te diriges a la puerta. Zayn se levanta también y tras dejar la foto de su madre sobre la cama, te sigue.
-Yo soy como me he expresado antes. Solo que cambio cuando estoy con la gente.
-¿Y que quieres que te diga? A mi me gusta el Zayn de antes.
-Muy pocas veces aparece, por no decir nunca. Y no se porque hoy a salido.
Bajas las escaleras y te sientas en una de las sillas de la cocina y Zayn se queda de pie. Sobre la barra esta el papel lleno de droga.
Lo coges y te lo guardas.
-¡Eh! Dame eso.
-No, no. Si esta aquí conmigo se que no lo tomaras.
-Tengo miles de esos por toda la casa. Es mas, en la chaqueta que tienes en tu casa también hay.
-¿Enserio?- suspiras y sacas el papel depositandolo de nuevo sobre la barra.
Zayn lo coge y lo deja en el armario de antes.
-Bueno, ya que voy a ser tu "prisionera".- Zayn se gira y te mira, puesto que tú continuas.- ¿Haremos algo?
-Como hacer haremos.- sonríe picaramente.
-Uf, ¿no puedes pensar en otra cosa?
-No hace falta que te responda a ello. Y a lo de antes, esta noche iremos a las carreras, el domigo cenaremos por ahí y el lunes, tú decidirás.
-El lunes iré a clase, como siempre.- dices convencida
-Sigue soñando, niña de papá, sigue soñando. 
Se va hasta el salón y se sienta en el sofá. Coge el mando y enciende la televisión.
Te acercas a él y te sientas a lado suya, ya que no hay mas sofás.
La televisión se enciende tras largo rato de espera. Están las noticias, naturalmente, ya es la hora de comer.
-Aunque sea tú "prisionera" me darás de comer, ¿verdad?
Zayn ríe y tú supones que ya a pensado mal. Gira su cabeza y te contesta tranquilamente.
-El numero de la pizzeria esta en los contactos.- dicho eso de su vaquero saca el móvil y te lo entrega.
Tú vas bajando hasta en dar con la pizzeria. Pulsas en el teléfono verde y ya se oye el primer 'bip'.
-¿Hola? Buenas. Quería pedir una pizza (...) si, pues familiar.- miras a Zayn y él te hace un gesto como diciendo 'de lo que a ti te apetezca'.- mitad de jamón y la otra mitad de barbacoa (....) vale (...) ¿que cual es la calle? Ah bien pues.- Zayn rápidamente coge un bolígrafo de la mesa y te escribe en el brazo la dirección y tú la dices conforme. Das las gracias y cuelgas. En unos 40 minutos podréis comer tranquilamente.
-¿Quieres coca-cola?- te pregunta Zayn.
-Vale.
En el salón hay una mesa pequeña. Saca de un cajón un mantel que lo extiende sobre ella. Va y viene de la cocina poniendo la mesa. Tú le ayudas colocando los platos y una bandeja pequeña con patatas campesinas.
-Gracias por la ayuda, niña de papá.
-Tampoco me iba a quedar sentada mirando como servías tú solo las cosas.
-Pensaba que la gente como tú erais así.
-No todos son así.- dices, ahora molesta.
Zayn se sienta en el sofá de nuevo.
-Oye, Zayn. ¿Tienes ducha?
-Como cualquier casa.
-Ya, pero esta es que es tan... No hay adjetivos para describirla.
-A mi me gusta, tiene cocina, salón, un baño y una habitación. Todo lo necesario para poder vivir unos pocos días.
-¿Vienes mucho? 
-Solo cuando quiero olvidarme del mundo, de las personas, de la ciudad...
-Pues ahora sera difícil olvidarte de las personas, digo, conmigo aquí ya que soy una persona.- ríes 
-Tú me haces olvidar a las personas, si estoy junto a ti, todo el mundo desaparece, ni siquiera oigo la tele, ni siquiera veo los muebles del salón. Solo estas tú y tu preciosa voz.
Esas palabras hacen que Zayn baje la cabeza para que no lo mires y que tú te pongas roja.
En ese momento incomodo suena la puerta, el repartidor. Zayn se levanta y va a abrirle.
-Buenos días.- dice Zayn alegremente
-¿Como puede vivir tan lejos? ¿Le llega la cobertura?- pregunta el repartidor entregándole una pizza.
-Pues, llegar me llega porque sino no se como estaría usted aquí.
El repartidor afirma avergonzado. Zayn le paga y se marcha.
-¡Que gente! Metiéndose en cosas que no le importan.
-Pues menos mal que no te has alterado mucho.
-¿Eh?
-Nada, déjalo, yo me he entendido.
Zayn se sienta de nuevo y abre la caja con la enorme pizza. 
Coges una porción y la depositas en tu plato. Zayn hace lo mismo pero con dos trozos de cada.
-Bueno, cuéntame algo sobre ti. ¿No crees que es justo?- comenta Zayn.
-Mi vida no es muy interesante.
-Algo habrás hecho algo guay. ¿Novios? ¿Estudios? No se cosas así.- anima Zayn
-Los estudios van bien, de momento.- ríes.
-¿Y los novios?- parece estar interesado en ese tema concretamente.
-Bua, tengo a todos los tíos detrás mía. Chasqueo los dedos y me aparecen veinte.- le dices irónicamente.
-No me extraña, eres preciosa.
-Gracias, supongo.
-¿Supones?- pregunta.
-Es que ya no me fió de ti.
-Es una pena...- ríe.
Termináis entre risas la pizza y vuestra bebida. Zayn te había comentado que después de comer siempre le gusta escuchar música ya que eso siempre lo hacia su madre y los dos bailaban con cada canción que salia en la radio.
Zayn enciende la radio, "Everything has changed, de Taylor Swift y Ed Sheeran", suena ahora mismo.
Empiezas a tararear, es una canción hermosa.
-Me encanta.- le comentas a Zayn.
-¿Te  gustaría bailarla conmigo?
Estira su mano y tú se la agarras.
Sus manos  están colocadas en tu cintura. Tus manos entrelazadas alrededor de su cuello. Y como no, vuestros ojos mirándose fijamente. 
Zayn no es que sea el mejor bailando, pero tampoco es que no lo haga bien. Bailáis, te da vueltas y todo eso al ritmo de la música.
Su voz se oye cantando la canción, ¿como puede ser tan hermosa? Los dos estáis haciendo un dúo perfecto. 
Termina la canción y Zayn alcanza tus labios y ambos os fundís en un hermoso beso.
-Gracias por este baile, me has recordado tanto a mi madre.- comenta algo triste.
-Ni siquiera las des. Bailas y cantas muy bien.
-¿A si? Hacia tiempo que no lo hacia.
Asientes. Os  volvéis a sentar. Zayn no era para nada como tú pensabas. Y ahora piensas que el fin de semana que vas a pasar con él no vaya a ser del todo malo. Sino que al contrario, sea algo que recordar de por vida. 
Sabes que en el momento que Zayn te lleve a las carreras cambie completamente su forma de ser. Así que lo que te toca ahora es disfrutar de este momento a solas, siendo como realmente él es.